Vincent van Gogh (1853-1890) fue un pintor postimpresionista holandés cuya obra tuvo un profundo impacto en el arte del siglo XX. Aunque su carrera artística fue breve —apenas unos diez años—, produjo más de 2,000 obras, incluyendo alrededor de 900 cuadros y más de 1,100 dibujos y bocetos. Su estilo único, caracterizado por colores vibrantes y pinceladas expresivas, influyó en movimientos como el expresionismo y el fauvismo.
Vincent Willem van Gogh nació el 30 de marzo de 1853 en Groot-Zundert, Países Bajos, en una familia religiosa y de clase media. Su padre era pastor protestante, y su madre era una mujer aficionada al arte y la jardinería, algo que probablemente influyó en su interés por el arte desde una edad temprana. Vincent fue el mayor de seis hermanos, y desde joven mostró un carácter reservado y profundamente introspectivo.
Van Gogh comenzó a trabajar en una galería de arte en La Haya a los 16 años, pero no encontró satisfacción en el comercio del arte. Tras una serie de empleos fallidos, intentó seguir los pasos de su padre como predicador en una región minera pobre de Bélgica, pero fue despedido por su fervor extremo. Después de esto, decidió dedicarse por completo al arte en 1880, cuando tenía 27 años.
En sus primeros años como artista, Van Gogh estudió en Bruselas y trabajó como autodidacta, influenciado por artistas como Jean-François Millet y los impresionistas. Sus primeras obras fueron mayormente sombrías, con colores oscuros y temas campesinos. Un ejemplo notable de esta época es
"Los comedores de patatas" (1885), que muestra a campesinos cenando en una atmósfera austera.
Sin embargo, su estilo cambió drásticamente después de mudarse a París en 1886, donde conoció a artistas como Henri Toulouse-Lautrec, Paul Gauguin, y los impresionistas. Bajo su influencia, su paleta de colores se volvió mucho más vibrante y luminosa. Fue en esta época cuando adoptó el uso del color y las pinceladas audaces que definirían su obra.
En 1888, Van Gogh se mudó a Arlés, en el sur de Francia, con la esperanza de crear una comunidad artística. Allí pintó algunas de sus obras más famosas, como "Los girasoles" y "La casa amarilla". Durante este tiempo, compartió una intensa pero tumultuosa relación con Paul Gauguin. El deterioro de su salud mental alcanzó un punto crítico en diciembre de 1888, cuando sufrió un colapso nervioso que culminó en el famoso incidente en el que se cortó parte de la oreja izquierda.
Después de su colapso en Arlés, Van Gogh pasó tiempo en hospitales psiquiátricos. A pesar de su sufrimiento mental, continuó produciendo una enorme cantidad de obras maestras. Algunas de sus pinturas más icónicas, como "Noche estrellada" (1889), fueron creadas durante su estancia en un asilo en Saint-Rémy-de-Provence. En este período, sus pinceladas se volvieron más agitadas y sus paisajes más dramáticos, reflejando su lucha interna.
En 1890, se trasladó a Auvers-sur-Oise, cerca de París, para estar bajo el cuidado del Dr. Paul Gachet, un médico aficionado al arte. A pesar de su aparente mejora, el 27 de julio de 1890, Van Gogh se disparó en el pecho y murió dos días después, el 29 de julio, a la edad de 37 años.
Una de las pinturas más icónicas del mundo. Van Gogh la pintó desde su ventana mientras estaba internado en el hospital de Saint-Rémy-de-Provence. Su vibrante cielo nocturno y uso dramático del color la convierten en una obra maestra del postimpresionismo.
Van Gogh pintó varias versiones de Los Girasoles. Este tema fue recurrente en su obra y es muy representativo de su uso intenso del color amarillo. Estas naturalezas muertas se encuentran entre sus trabajos más famosos y están distribuidas en museos importantes como el Museo Van Gogh en Ámsterdam y la National Gallery en Londres.
Esta pintura muestra el dormitorio de Van Gogh en su casa de Arlés, Francia. El uso de colores planos y la perspectiva distorsionada reflejan su estilo personal. Existen tres versiones de esta obra.
Una de sus primeras grandes obras, muestra a campesinos humildes cenando en una escena sombría y terrosa. Refleja el enfoque social y realista de Van Gogh antes de que su estilo evolucione hacia el uso de colores más vibrantes.
Pintada en los últimos meses de su vida, es considerada por muchos como un reflejo de su estado emocional. El paisaje dramático, el cielo oscuro y los cuervos volando sobre el campo sugieren un sentimiento de aislamiento y desesperanza.
El médico que cuidó de Van Gogh en sus últimos días en Auvers-sur-Oise. Este retrato es famoso tanto por su valor artístico como por su historia: una versión de esta pintura se vendió en una subasta en 1990 por una suma récord en ese momento.
Esta obra muestra a Van Gogh poco después de su famoso incidente en el que se cortó parte de su oreja. Este autorretrato es uno de los más conocidos de su serie de autorretratos, reflejando su lucha mental y su dedicación al arte.
Van Gogh pintó esta obra durante su tiempo en Arlés. Es una vibrante escena nocturna con una atmósfera cálida y luces que casi parecen brillar desde la pintura. La escena de un café al aire libre se ha convertido en una imagen icónica.
Es la única obra que Van Gogh vendió en vida. La pintura muestra una escena de trabajadores en un viñedo al atardecer, bañados en tonos rojizos y dorados. La obra se encuentra actualmente en el Museo Pushkin de Moscú.
Una de las últimas obras de Van Gogh, pintada poco antes de su muerte. El edificio se muestra en un estilo distorsionado y emotivo, con el cielo que parece moverse en contraste con la arquitectura fija, lo que refleja las tensiones internas del artista.